Publicado el 13 de dic, 2019

Las mellizas que portan el estandarte de los éxitos del remo chileno

El remo se ha transformado en una de las disciplinas más exitosas del deporte chileno. De la mano del proceso que conduce técnicamente el español, Bienvenido Front, junto a su cuerpo técnico, la especialidad ha conquistado un sinnúmero de títulos sudamericanos, panamericanos y mundiales y aportó, este 2019, con cuatro de las 13 medallas de oro que nuestro país obtuvo en los pasados Juegos Panamericanos de Lima 2019.

Y esos triunfos tienen dos caras que cada vez son más reconocibles para la ciudadanía: se trata de las hermanas Melita y Antonia Abraham Schussler, nacidas en San Pedro de la Paz en julio de 1997, junto a los cuatrillizos que completan Alfredo e Ignacio, todos dedicados en cuerpo y alma al remo.

Las Abraham no conocen de límites y con solo cuatro logros de su palmarés podemos conocer su exitosa carrera: vicecampeonas panamericanas en Toronto 2015; campeonas mundiales sub 23 en el 2017 y dobles medallistas de oro en los Juegos Panamericanos de Lima 2019. Su próximo paso es clasificar juntas a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, que serían los primeros para Antonia, pero los segundos para Melita, que ya compitió en Río 2016.

Tras el reconocimiento del COCh, Melita sostuvo que “estamos muy contentas de que no solo nos premien a nosotras, sino que reconozcan a todo el remo chileno. Trabajamos mucho como equipo para esto”. Por su parte, Antonia agregó que “para obtener los resultados de Lima nos concentramos durante ocho meses y eso dio sus frutos. Este reconocimiento es inesperado, pero sin duda, una motivación para seguir adelante”.

La Ministra Cecilia Pérez valoró el ejemplar trabajo que se realiza en esta disciplina señalando que “el remo nos muestra claramente el camino que debemos seguir para el desarrollo del deporte chileno. Sus resultados hablan por sí solos y desde el Ministerio seguiremos apoyando la gestión del head coach, Bienvenido Front y su equipo. En el Centro Olímpico de Curauma no solo tenemos un polo de desarrollo del alto rendimiento, sino que también un lugar donde se irán entrenando las futuras generaciones que, por cierto, seguirán los pasos de Melita y Antonia”.

El próximo objetivo de las hermanas Abraham es intentar buscar un cupo para los Juegos Olímpicos de Tokio, en el clasificatorio preolímpico que se efectuará en mayo de 2020.